La primera vez que cayó en mis manos su libro "Sex" me sentí muy desdichada porque a) el libro no era mío (y no tenía dinero para comprarlo) y b) no había posibilidad alguna de quedarme a solas con él. Desde la primera foto hasta la última, pasando por cada uno de los textos, sentí el mayor calentón que nunca antes había alcanzado con algo que simplemente es de papel.
Me parece una obra maestra. No sé, realmente Madonna es una mujer inteligente, pero con este libro comprendí, que más allá de toda la frivolidad que rodea su vida, y más allá de todo ánimo exhibicionista, podría empezar a considerarla como una artista completa, con ideas originales y una buena concepción poética del sexo y del deseo.
Me fascinó especialmente uno de los textos, y se ha quedado desde entonces y para siempre en mi memoria:
"Sólo quien te hiere puede consolarte, sólo quien inflige el dolor puede retirarlo".
Por muchos años la adoré como si fuera una santa, una gurú. Ahora ya no soy tan mitómana, pero siempre tendrá su lugar en mi imaginario erótico.
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